El uso de dosis altas de atorvastatina, sis e
compara con el uso de un placebo, en la prevención secundaria del ictus es
coste-efectivo, ya que produce beneficios en salud importantes a un coste
incremental razonable. Concretamente, en el 99% de las ocasiones el coste
incremental por año de vida ganado, ajustado por calidad se situaría por debajo
del umbral de eficiencia de 30.000 €/AVAC.
Esta es la conclusión de un estudio
publicado recientemente en Revista de Neurología en el que se
destaca el hecho de que las estrategias de prevención son fundamentales no sólo
para reducir la incidencia de ictus primario, sino también el recurrente y
otros eventos cardiovasculares.
Es necesario un control estricto de los
factores de riesgo mediante la modificación del estilo de vida, el control de
la hipertensión arterial junto con el uso de las estatinas, y la
antiagregación, en todo paciente de alto riesgo vascular y en los ictus no
cardioembólicos.
[Rev Neurol 2010]
Arrospide A, Mar J, Vivancos-Mora J, Rejas-Gutiérrez J y Caro J
Arrospide A, Mar J, Vivancos-Mora J, Rejas-Gutiérrez J y Caro J
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